DE SABINA AL CIELO

Cuando llegaste llevabas una valija, con un reloj que marcaba las 21:30, con vaso de güisqui, un perro de madera y un bombin marron.

Un cigarro...y miles de estrellas contemplando aquella nube negra que dejaste en el pasado.
Estabas en el puerto de esa gira-ultramarina.
Estabas en el puerto de mi Buenos Aires querido, estabas en el aire que respiro.
Estabas en el escenario del rex, estabas en mis lágrimas.

Cuando llegaste el sol ya no estaba.
Cuando llegaste era de noche y estaba la luna llena.
y Buenos Aires te estaba esperando, Buenos Aires llóro tu ausencia.
Hoy en Buenos Aires salió el sol.
Hoy en Buenos Aires, volvió.

De Sabina al cielo.
y con Sabina me muero.