12 abril 2006

EN UNA CAJA AZUL

Debo recordarte que me olvide un par de suspiros sobre la almohada, no es ningún tipo de reclamos, ni pretendo que me los mandes contrareembolso.
Entre otras cosas paso a detallar todas las cosas que me dejé olvidadas, para que las metas en una caja invisible y me las devuelvas. En la fuente perdí unos cuantos asombros; pero de vez en cuando paso a saludarlos.
Primero, sí subis por la escalera, encontraras mis descanzos miserables para justificar todos mis lágrimas; que perdí en el backtage de un ascenso sin velocidad.
Al abrir la puerta dejé mis huellas, para jusficar que hay en el fondo de los bordes de los discimulos.
Al cerrrar la puerta, por casualidad se me cayo una pluma, creo que esta entre las bisagras, esa no la quiero. te la regalo.
Mientras me sentaba perdí el desconsuelo, y el sueño.
Y perdí altura, cuando apenas quedamos a oscuras. Así no me vas a volver a encontrar. Prendé la luz amarilla. Seguramente es la de la precaución.
Junto a la ventana me dejé un par de ilusiones, un puñado de arena que nunca me diste, y tire por la el viento que vuela por tu calle, ganas, ganas de...
Lo que más lamento es haberte regalado tantas caricias, por suerte son reproductivas. Si buscas un poco en los sentimientos que deje plasmados en los espejos, podras devolverme casi todas sin daños y sin cicatrizes.
En los espacios por donde miras, deje tan solo la forma de ser suicida por querer que me cures las heridas.
Las paredes son testigos de estos olvidos.
En la caja solo guardá mis cosas, no quiero que metas ni un poco de las cosas que te parezcan que me haya olvidado.
Mientras dormias dibujé en tu espalda un par de alas, que seguramente no sabes como usarlas, podes devolvermelas o si queres puedo darte un manual "como aprender a volar".
Si te fijas bien, en tu corazón solo deje un recuerdo, eso tambien te lo dejó, es solo un recuerdo. Quizas no lo haya dejado ahi, por las dudas fijate bien.
Antes que te fijes si me olvide algo en tu bolsillo, te digo que la piedra la tengo, quizas la deje en la fuente, creo que le pertenece más que a mi.
Flotando estan mis conversaciones de gatos y perros, de alguna manera guardalas con cuidado, son fragiles, tienen mucho valor para mi.
En el tiempo, me olvide de eludir tu presente, por eso es que no he vuelto a pisar tu suelo.
Me olvide también doscientas miradas, mas una. Y olvidé de distinguir a mi enemigo.
Creo que el lugar donde mas cosas dejé fue en tu cuerpo, pero no creo que me las puedas devolver.
Todo lo que me olvidé en la almohada te lo dejo, eso no se recupera con meterlas en una cajita de cristal.
Dejé 456 mil millones de palpitaciones desde que te conocí, un par podras recuperar, no busques en los lugares que suelo ir. Estan por todas partes... no las dejes caer!
Antes de irme dejé un par de nudos en la garganta de no poder, de no saber, de no tener remitente para que vuelva a tener la intencion de cargar con la culpa.
En la esquina dejé el sabor amargo de no volverte a ver. Es muy dificil que lo puedas atrapar, hace lo posible, seguramente me servirá para otra historia sin sabores.
Y por último si alguna vez, me ves sin alas.... a esas las perdí en otros vuelos.

4 comentarios:

samitobrus dijo...

Un placer recibir tu visita, te espero siempre dentro de mis sueños; además yo también tengo al Maestro Sabina en la cima de la genialidad. Me gustaron mucho tus textos con las palabras claves en tamaño más grande. Me gusto mucho y volveré. Un beso desde Barcelona.

Anónimo dijo...

Amiga... ya te lo dije, pero quiero dejarlo aquí por sentado... ME ENCANTO LO QUE ESCRIBISTE!! Al menos puedo encontrar algo positivo... te inspiró para escribir lo que también sabes escribir...
Te quiero mucho, mucho!
Y acordate, no te espero del otro lado de la nube negra...dame la mano y la cruzamos juntas.
Sole

samitobrus dijo...

Desde la puerta de casa, y a punto de salir por estas carreteras apestadas de gente que escapa del mismo lugar que yo, me apetecía mandarte un beso fuerte y esperar volver a verte pronto. Gracias de nuevo por las visitas, seguirémos en contacto. hasta pronto.

Anónimo dijo...

Llegué a este lugar sólo por casualidad.
Pero no quería dejar de decirte,
que no fue uno más.
Lo que dejaste acá es hermoso. Simple. Triste. Feliz.
Y lo más importante: deja huellas.

Saludos!